En 2022, la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) tenía contabilizadas 647 empresas pequeñas y medianas dedicadas al arrastre y salvamento en el servicio público federal, 20.9% más que hace cinco años.
Datos de la dependencia detallan que ambos estratos empresariales son los únicos que se han mantenido en crecimiento en dicho periodo. Además, actualmente representan una cuarta parte del total.
Por otro lado, en 2022 había registradas 622 empresas pequeñas – que tienen entre seis y 30 unidades–, se trata de un aumento del 20.1% frente a las 518 de 2017.
Si bien las medianas – que tienen entre 31 y 100 vehículos – son apenas 25 compañías de grúas, son 47.1% más que hace cinco años.
En materia de parque vehicular, agrupan 7,315 de las unidades registradas para este servicio; esta cifra significa 60.7% de las 12,047 totales.
En este renglón sobresalen las empresas pequeñas que por sí mismas reúnen 6,317 grúas, más de la mitad de las registradas ante la SICT. No solo eso, esta flota ha crecido 17.4% desde 2017.
Respecto a las compañías medianas, cuentan con un parque vehicular de 998 unidades, 49% más que cinco años atrás.
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Empresas de hombres-camión pierden terreno
Hace cinco años, los hombres-camión representaban 82.9% de las empresas de servicios de arrastre y salvamento; ahora, son 75.9 por ciento, perdiendo siete puntos porcentuales de participación.
Si bien son la mayoría, con 2,042 empresas, son 21.2% menos que en 2017, cuando sumaban 2,590 compañías.
En flota vehicular también han presentado retrocesos, pues con 4,624 unidades, disminuyeron 11.5% en cinco años.
Cabe mencionar que la SICT solo tiene registrada una empresa grande, la cual se ha mantenido a lo largo de los últimos cinco años. Ésta cuenta con una flota de 108 vehículos.
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