Consciente de que el servicio postventa es fundamental para mantener cautiva la lealtad de sus clientes, Volvo Buses implementó contratos de mantenimiento, los cuales actualmente avalan a 700 autobuses en el territorio nacional.

Rafael Kisel, Director General de la división de autobuses de la marca sueca en México, señaló que a la par de la cobertura que ofrecen a sus clientes a través de sus puntos de contacto, tienen garantizada la existencia de refacciones con un inventario equivalente a 230 millones de pesos. Además, cuentan con un almacén en Toluca con más de 20 millones de dólares en partes, las cuales pueden ser entregas en cuestión de horas a lo largo de todo el territorio nacional.

El directivo agregó que la disponibilidad de partes debe de ir acompañada de un servicio especializado; es por ello que los técnicos de la red de Volvo Buses han seguido una preparación teórico-práctica a fin de garantizar que cuentan con los conocimientos necesarios para ofrecer una atención de excelencia en un tiempo óptimo de respuesta.

Igualmente explicó que los técnicos deben tener una preparación previa en Mecatrónica para poder someterse a la especialización en autobuses. La evaluación de conocimientos está a cargo de personal de Suecia, que a través de pruebas cronometradas, califica el desempeño de los participantes en la capacitación.