¿Innovar o no innovar? Esa no es la cuestión. Las interrogantes están más relacionados con los qués, cómos o dóndes, pues sobre todo en la pandemia, la innovación empresarial ha sido una de las principales preocupaciones en la mayoría de las organizaciones.

Así que para tener algunas aproximaciones sobre las repuestas en torno a la innovación empresarial, especialistas coinciden en factores básicos y fundamentales para dar ese siguiente paso.

Pedro Alcalá, fundador de Complexity & Innovation Hub (Cihub), considera que para continuar o emprender este camino de la innovación empresarial se puede hacer en dos vías prácticas y concretas: la supervivencia y regresar a las bases.

El primer punto, explica, está relacionado con todo lo que han tenido que hacer las empresas para seguir a flote. Hace un año, cuando comenzó la pandemia, los temas de flujo de efectivo, ajustes operativos o recortes necesarios fueron acciones emergentes.

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“Para muchas empresas se encendió el switch. Ajustaron su modelo de negocio y se adaptaron a la pandemia. Las acciones intrincadas son justo eso, innovar, darse cuenta de que algo ya no funciona y cambiarlo. En este sentido, el uso de las tecnologías sufrió una aceleración que en otras circunstancias habrían tomado unos diez años. Algo innovador fue justo eso, no tener miedo a la tecnología y aprovecharla para sobrevivir”. 

Y aunque esto parezca mero instinto, Alcalá aclara que algo que también resulta innovador es crear un plan de emergencia, un protocolo. Ahora, con la reactivación económica, las empresas que estén innovando estarán listas para esta nueva realidad. 

En cuanto a regresar a las bases, se refiere a que la innovación no necesariamente requiere el desarrollo de alta tecnología, sino en usar, aprovechar y explotar lo que hoy está disponible, como los canales de comunicación, las plataformas sociales, ventas en línea, generación de contenidos y todas estas herramientas que llevan algunos años posicionándose en las estrategias empresariales. 

“Desde los procesos internos hay que hacer una reflexión en todo lo que se puede mejorar a partir de la innovación. Comunicación, productividad y eficiencia son temas totalmente susceptibles de la innovación. Sin embargo, sí requiere invertirle tiempo, talento y, en algunos casos, recursos, a fin de dar este paso definitivo hacia nuevas formas de trabajo”, agrega Pedro Alcalá.