En meses recientes, la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT) ha alertado que el abasto de diesel de ultra bajo azufre (diesel UBA o DUBA) no se está cumpliendo en tiempo y forma.

Incluso, con base en el Plan de Negocios de la paraestatal, se contará con este combustible en su totalidad hasta 2024, cuando entre en operación la refinería en Dos Bocas.

Datos del Sistema de Información Energética (SIE) de la SENER, detallan que la producción de este combustible en las seis instalaciones de Pemex va a la baja en el año.

Durante enero se reportaban 50.01 miles de barriles diarios (Mbd), para febrero registró un incremento del 1.38 por ciento, del 70.73% para marzo, 81.87% en abril, alcanzando su máximo en mayo con 99.93 Mbd, un ascenso del 99.82% respecto al arranque de 2019.

No obstante, en los meses subsecuentes la tendencia de producción de DUBA ha ido a la baja, llegando a los 79.43 Mbd en septiembre –la cifra más actualizada–, una caída del 20.51% en comparación con el quinto mes del año.

Sumado a ello, se registró un aumento en la refinación de diesel de más de 15 partes por millón (ppm). En mayo, este combustible regular concentró el 27.80% de la producción de diesel mensual; para septiembre ocupó el 39.80% de la refinación.

Respecto al rol de cada refinería, Cadereyta es la instalación que produce la mayor cantidad de DUBA, registrando 42.31 Mbd durante septiembre, su máximo en todo el año. Además, en dicho mes reportó por primera vez en cero la refinación de diesel regular.

La refinería de Minatitlán, por su parte, desde agosto de 2016 prácticamente no genera diesel sucio. Aunque su refinación de DUBA descendió en los últimos meses, se coloca como la segunda sede con mayor producción.

En contraste, Tula y Madero continúan sin producir diesel limpio; la sede tamaulipeca incluso registra un aumento en la refinación de diesel de más de 15 ppm. Las instalaciones de Tampico se ubican como las que más generan este combustible: 25.40 Mbd durante septiembre, 48.34% del diesel regular total del mes.

Por otro lado, el Sistema de In­formación Arancelaria Vía Internet (SIAVI) de la Secretaría de Economía revela que, durante el año, mensualmente se han importado entre 234 y 297 Mbd de DUBA.

Considerando las cifras más actualizadas del SIE y el SIAVI, luego de mayo de este año, la disponibilidad de diesel limpio presenta una tendencia a la baja –sumando la producción e importación–. En el quinto mes de 2019, alcanzó los 428.52 Mbd y para agosto cayó 24.5 por ciento, es decir, a 323.28 miles de barriles diarios.

La ANPACT dio a conocer que, durante octubre, la comercialización al mayoreo de camiones, tractocamiones y autobuses descendió 30.5 por ciento, mientras las ventas al menudeo decrecieron 19.8 por ciento.

“La caída generalizada que experimentamos desde hace un par de meses es producto de la incertidumbre respecto a la disponibilidad de diesel UBA en el 100% del territorio nacional. La falta de este combustible limpio ya está afectando a los productores y ello repercutirá en los transportistas de manera notoria y preocupante”, manifestó Miguel Elizalde, Presidente Ejecutivo de la ANPACT.